Las aguas de Lekeitio, al igual que el resto de la costa vizcaína, esconden importantes restos arqueológicos. El último hallazgo comenzó ayer a salir a la superficie con el inicio de las tareas de excavación de un cañón de finales del siglo XVIII o principios del XIX localizado por un hondartzaina en la desembocadura del río Lea, entre las playas de Isuntza y Karraspio, en Mendexa.
Junto al cañón, dedos metros de largo, un calibre de 12-18 y 700 kilos de peso, también han aparecido restos de madera de la misma época. El descubrimiento tuvo lugar de manera casual a principios de julio, cuando un hondartzaina encontró una pieza que, a su juicio, guardaba bastante parecido con un arma de guerra. La Diputación y el Ayuntamiento activaron el plan de recuperación, que arrancó con la solicitud a la Demarcación de Costas de los permisos para intervenir en la playa. «Durante la temporada estival, los hondartzainas lo han cuidado y protegido con sacos de arena», detallaron ayer desde el Consistorio.
El equipo de arqueología contratado por la Administración foral necesitará varias jornadas para sacar a la luz el artefacto, que posteriormente será trasladado a un depósito de Irún para continuar con las investigaciones. «Los trabajos están condicionados por las mareas», señaló José Manuel Mates, director de la excavación. Después de delimitar el área de intervención, de cinco metros de largo por otros tantos de ancho, los especialistas utilizarán un brazo tractor para levantar y mover el cañón.
En las cercanías también han aparecido otros vestigios históricos. «Se trata de varias maderas y un tubo que en principio pueden corresponder a épocas similares», añadieron. Las primeras hipótesis barajadas por los arqueólogos apuntan a que se trata de un cañón diferente a los catalogados hasta el momento en Lekeitio. «Es más largo y fino», apuntó el director de Patrimonio Etnográfico de la Diputación, Alberto Santana. Los investigadores se centrarán ahora en comprobar si formó parte del armamento naval empleado por los ingleses en la época de la Guerra de la Independencia para combatir a los franceses que habían tomado la costa vizcaína.